lunes, 20 de febrero de 2012

Reflexión semanal del 20 al 26 de Febrero

SER TESTIGOS
(Hechos 1:6-11)
Objetivo: Qué es y en qué consiste ser testigo de Cristo.
Introducción
1.- ¿Qué ocurre cuando Jesús se presenta a nuestras vidas, qué es lo primero que deseamos hacer y qué es lo que nos recomienda el Señor? Lee Jn. 13:37-38.
“Le dijo Pedro: Señor, ¿por qué no te puedo seguir ahora? Mi vida pondré por ti. Jesús le respondió: ¿Tu vida pondrás por mí? De cierto, de cierto te digo: No cantará el gallo, sin que me hayas negado tres veces”.
Cuando aparece Cristo en nuestras vidas, la mayoría de nosotros queremos hacer muchas cosas para Él. Y eso está bien, porque demuestra un corazón agradecido. Pero Jesús nos dice que no estamos preparados, que tenemos que esperar.
Algo parecido le ocurrió a Pedro: “mi vida pondré por ti” le dijo el ingenuo. Y el Señor le tuvo que bajar los humos: “¿Tu vida pondrás por mí? De cierto, de cierto te digo: No cantará el gallo, sin que me hayas negado tres veces”.
Mira Pedro ¿cómo vas a dar tu vida por mí, si ni siquiera vas a ser capaz de confesarme delante de una sirvienta? Y... ¿sabes por qué serás incapaz de confesarme, incapaz de ser mi testigo? porque tienes que esperar el poder de lo alto. En tus fuerzas nunca podrás.
A nosotros nos pasa lo mismo, pensamos que estamos capacitados para hacer grandes cosas (¿defender al Señor predicando, por ejemplo?), sin embargo no hemos obedecido la orden más sencilla que se nos ha dado desde que se apareció Jesús en nuestra vida: esperar en Jerusalén, esperar a la obra que Dios tiene que hacer en nosotros a través del ES. Muchas veces por las mañanas no estamos dispuestos a esperar en oración y confiar en que el Señor derrame sobre nosotros su E. y así poder salir a pelear la buena batalla llenos del ES.
Vv. 6-7
2.- ¿Cuál es la 1ª enseñanza que vemos en el v. 6?
Que tenemos un reino.
3.- ¿Cuál era la pregunta recurrente en los discípulos sobre el advenimiento del reino? Lee v. 6.
Si sería restaurado el reino a Israel en ese tiempo en el que estaban viviendo.
4.- ¿Qué respuesta les hubiese gustado escuchar de Jesús a esa pregunta y por qué?
Que ese reino sería instaurado ya. Querían un reino político y un rey militar, para que les liberase del yugo romano y les llevase a la libertad que tanto ansiaban.
5.- ¿Qué esperaban ellos en lo personal sobre el advenimiento de ese reino político y de su Mesías terrenal?
Que su instauración les iba a proporcionar ¡ya y en ese momento! una posición política que les trajese privilegios terrenales.
Esto ya lo vimos en la pregunta que la madre de Santiago y Juan le hizo a Jesús sobre si sus hijos se iban a sentar, uno a su derecha y otro a su izquierda en el reino de los cielos. Y en Mt. 20, vemos como el reino del que habla Jesús es un reino de servicio, en el que el mayor es el que sirve.
6.- Aunque en el v. 6 no viene una enseñanza clara del reino que venía a traer Jesús, ¿que enseñanza podemos sacar de lo que Él dijo acerca de ese reino?
La enseñanza es: que este reino (al que tú estás invitado a entrar y del que formas parte si es que has sido bautizado con el ES) es un reino de servicio.
La enseñanza es: que el interés nuestro para entrar en este reino no debe estar basado en una recompensa o en un deseo carnal para conseguir: posición, influencia, autoridad, poder, dinero, posesiones, reconocimiento, prestigio, gobierno sobre las personas, etc.
Si encuentras a algún creyente que, so pretexto de haber sido llamado por el Señor a algún ministerio, pretende conseguir: posición, influencia, autoridad, poder, dinero, posesiones, reconocimiento, prestigio y/o gobierno sobre las personas... es alguien que como mínimo está equivocado, gravemente equivocado.
7.- En el v. 7 podemos sacar otra enseñanza, ¿cuál crees que es?
El futuro pertenece a Dios y no a nosotros.
Cualquiera que se adentre allí (más allá de lo que ya nos ha sido revelado en las Escrituras) está entrando en un terreno muy peligroso en el cual, como mínimo, saldrá equivocándose.
Cristo en su respuesta, es bien directo. No sé como todavía hay personas que, llamándose cristianos, se atreven a poner fechas, tiempos o sazones a aquello que es de la sola potestad del Padre.
Por lo tanto, la enseñanza para nosotros es clara: debemos evitar explorar los tiempos que nos son desconocidos.
8.- Pon un ejemplo práctico en tu vida sobre el v. 7
Si a mí me hubieran contado todo lo que he tenido que pasar en mi vida cristiana antes de llegar al día de hoy, como mínimo hubiera habido un gran sufrimiento, si no una renuncia expresa a este reino.
V. 8
9.- Después de ver que tenemos un reino, en el v. 8 vemos que tenemos tres cosas más ¿Cuáles son?
Que tenemos una tarea, un poder y un método.
10.- ¿Cuál ha de ser nuestra principal labor y en qué consiste y en qué no consiste?
Ser testigos.
  • que consiste en: testificar de Cristo, de una persona. Nadie es testigo de una filosofía, ni de un pensamiento, ni testigo de unas normas de conducta.
  • y no consiste en: adivinar el futuro.
11.- ¿Cómo podremos llevar a cabo esa tarea?
Con poder de lo alto.Pero no tenemos poder para realizarla, así que Dios mismo nos otorga ese poder.
Entender esto así es fundamental. Entender que no tenemos poder en nosotros mismos es muy importante, porque de lo contrario podríamos pensar que Dios elige a los que tienen poder, que elige a los capacitados, cuando en realidad sucede todo lo contrario. Dios capacita a los que elige. Y los capacita con poder de lo alto. Por eso la gloria es toda para Él.
12.- ¿Diez días después del la ascensión del Señor, los discípulos ya no desearon más, lo que siempre le habían reclamado al Señor en cuanto al advenimiento del reino. ¿Por qué crees que esto sería así?
Una vez que estos discípulos del Señor recibieron ese poder de lo alto, no volvieron a preguntar jamás sobre el poder temporal que hasta entonces no dejaban de reclamarle al Señor.
Desde entonces ya no necesitaron nada más. Ese poder de lo alto fue suficiente para dejar de anhelar las cosas del mundo y que constantemente le exigían a Jesús. Ahora ya no pedían posiciones, ni autoridad, ni reconocimiento, ni fama sino todo lo contrario.
Así que si pedimos que se nos reconozcan nuestras virtudes (porque ¡yo lo valgo!!!) es sintomático de que, muy probablemente, no estemos viviendo en el mismo reino del que habla Jesús.
Ese poder y su manifestación (la llenura del ES), es lo que verdaderamente anhela el corazón del hombre. Así que cuando le alcanza, deja de perseguir las cosas de este mundo.
13.- ¿Cómo es la palabra “testigo” en Griego y qué quiere decir?
La palabra testigo en Gr. es Martus (Strong 3144), de donde proviene la palabra española “mártir”. Y significa uno que da testimonio mediante su muerte. Así que ser testigo implica ser una persona que está dispuesta a morir por declarar lo que ha visto y oído y conoce acerca de alguien.
14.- ¿Qué quiere decir que hemos de empezar por Jerusalén, seguir por toda Judea, Samaria y hasta lo último de la tierra?
Él nos dice que debemos empezar por Jerusalén y eso significa algo muy sencillo: que ni se te ocurra dar testimonio de mí, en ningún lugar, si antes no lo has hecho en tu propio corazón. Jerusalén era el centro del pueblo de Israel. Así que si en tu Jerusalén no hay testimonio de que yo vivo, no conseguirás dar testimonio más allá.
Y lo has de hacer hasta la muerte, como la propia palabra indica “Martus”. Si no estás dispuesto a crucificarte a ti mismo en tu propio corazón, nunca podrás ser testimonio en la siguiente localidad más cercana que es Judea.
¿Dónde está Judea?, pues Judea es tu familia. Y el Señor nos habla de “toda” Judea. O sea que debemos dar testimonio a toda nuestra familia antes de irnos al África a las misiones. De nada nos vale ir a las misiones, cuando en nuestro entorno familiar no hay un testimonio de que estamos muertos a nosotros mismos y de que Cristo vive.
Si esto no sucede previamente en Jerusalén y en Judea, nuestro testimonio no tendrá poder en ningún otro lugar. Si tu mujer e hijos ven que lo que dices no se corresponde con lo que haces... y hasta el martirio (Martus), no podrás ser un testigo válido y efectivo en ningún sitio.
15.- ¿Qué implica ser un testigo fiel y qué es lo que no implica?
Ser testigo fiel, no implica que el resultado final va a ser la aceptación de tu testimonio como válido. La gente puede aceptar tu declaración o no. Pero desde luego un testigo falso nunca podrá ser usado. Sólo podrá ser a través de ti, si 1º es en ti.
16.- ¿Qué similitud ves entre el bautismo del Señor y el bautismo del ES que hemos de esperar de lo alto?
Jesús antes de iniciar su ministerio, fue bautizado y en ese momento descendió sobre Él el ES y lo fortaleció para hacer frente a Satanás. Pues ahora Jesús nos envía, como el Padre le envió a Él. Y también nos fortaleció de la misma manera al enviarnos al ES.
Vv. 9-11
17.- ¿En qué consiste la promesa de los vv. 9-11?
Que volverá. Que la instauración de Su reino se llevará a cabo cuando Él regrese. Que aquello que los discípulos no paraban de preguntar y por lo que anhelaban, llegará. Pero antes Él tiene que partir, y hasta que regrese, ellos tienen una tarea: la extensión del reino hasta lo último de la tierra a través del ES en un nuevo tiempo, un nuevo periodo: el periodo de la gracia.
18.- ¿Cuál pudiera ser el motivo la ascensión del Señor se ve relatada en una línea y con pocas palabras en el v. 9?
Si tú o yo hubiésemos querido engañar sobre este asunto, nos hubiésemos deshecho en explicaciones y datos cosmológicos de cómo esto ha sido posible. Pero está claro que Dios no pretende darnos clases de cosmología ni tiene ninguna necesidad de justificar sus actos de poder. Lo hace y hecho queda, no necesita de la señal para que se le crea. Él es Dios y sólo sus hijos pondrán su esperanza en Él y no en sus señales.
 

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