Predicación sobre Lc. 15:11-32 el día de los bautismos de SemillaBilbao el 31 de Julio de 2011.
domingo, 31 de julio de 2011
El Gozo de Dios
Predicación sobre Lc. 15:11-32 el día de los bautismos de SemillaBilbao el 31 de Julio de 2011.
domingo, 10 de julio de 2011
lunes, 4 de julio de 2011
Reflexión semanal del 4 al 10 de Julio
¿QUÉ ES LEY, QUÉ ES JUSTICIA?
(Mateo 5:17-20)
Objetivo: Reflexionar sobre qué significa la Ley y la justicia en la boca de Jesús.
¿QUÉ ES LEY?
VV.17-19
1.- Los escribas y fariseos tenían la reputación de ser los guardianes de la ley. Ellos exigían buenas obras y tenían a la ley en alta estima ¿Y Jesús?
En este Sermón del Monte vamos a ver que Jesús no sólo respetaba la ley, sino que su respeto y el honor que le profesaba era inmensamente mayor que la que le tenían los judíos. Ellos habían anulado la ley de Dios con todas sus tradiciones y creían que cumpliendo la ley se podrían salvar, olvidándose del carácter.
Pero Cristo, en este Sermón, viene a poner todo en orden. Cuando Jesús reclama buenas obras, lo hace después de explicar cuál es el carácter de los discípulos y que es entonces cuando sí podremos hacerlas y además como resultado de ese carácter y nunca como requisito para ser aceptados en el reino.
2.- Si Cristo no vino a abrogar la ley (según el v. 17) ¿a qué vino?
Vino para cumplirla en dos sentidos:
a.- Vino para capacitarnos a cumplirla.
Según las Bienaventuranzas, sólo estas personas convencidas de su pobreza espiritual y que se habían lamentado por ello y que iban mansamente a la Justicia, sólo estas personas con una naturaleza nueva podrían hacer esas obras y no como un requisito para la salvación, sino como un resultado.
O sea que, tal y como vemos en este contexto expositivo de Mateo 5, las "buenas obras" son obras de gratitud por la salvación recibida. No hago nada para que Dios me lo deba, me lo pague en forma de salvación, sino que recibo su salvación gratuita por la fe en Cristo y como consecuencia y por amor y porque estoy ya capacitado por Cristo, es cuando realizo el cumplimiento de las obras de la ley.
Por lo tanto, es absolutamente evidente que Jesús, no sólo no vino a abolir, sino todo lo contrario. Su propósito fue que en nosotros, en los seguidores de Cristo se cumpliese (no un poco, no una parte) sino en su totalidad y en su perfección la ley. Que nuestras vidas estuvieran llenas del cumplimiento de la ley y los profetas debido al sacrificio vicario (sustitutivo) y por fe en su sangre. No que nosotros la pudiésemos cumplir en su totalidad, ya que eso es imposible, sino que Él la cumplió por nosotros y nosotros como agradecimiento, por amor y por su poder (por su capacitación) en nuestras vidas podamos hacer esas buenas obras que no salvan pero que sí reflejan una evidencia: la salvación.
b.- No sólo quiere decir esto (el cumplimiento de la ley en sus seguidores), sino que también se refiere a que Él era el cumplimiento de toda la ley. Él era el cumplimiento de todo lo que se habla en el AT. Que sin Él el AT estaba incompleto, sin cumplimiento.
Ejemplos: la encarnación, la crucifixión, la resurrección, la ascensión, Pentecostés, la 2ª venida.
3.- ¿Cuál es el propósito de la ley.?
La ley de Éxodo 20 (los 10 mandamientos) estaban para mostrarle al pueblo de Israel la justicia de Dios y el carácter de Dios. No para que fuese justificado Israel por el cumplimiento de la ley, sino para que fuese encerrado bajo pecado y toda boca se cerrase intentando justificarse…. para que llegada la justicia de Dios en el sacrificio de Cristo, todos, conociendo la ley y sabiendo la incapacidad que tenían en ellos para cumplirla, salieran corriendo a ser bañados por la sangre de Cristo y ser justificados gratuitamente por su sacrificio. Este era el propósito de la ley.
La ley de Moisés no vino para que siendo cumplida por el hombre este se pudiese justificar, puesto que es imposible para él cumplirla, sino que vino para mostrarle al hombre hasta dónde había caído por haberse soltado de la mano de Dios y enseñarle el carácter de un Dios Santo y Justo.
4.- ¿Qué significa “jota” y “tilde”?
Jota y tilde son expresiones escritas del hebreo.
La Jota en gr. es "iota" (en hb. "Yoth") y suena como la "y" de yo. Era una letra muy chiquitita.
La tilde es una "keraia" en Gr. y es una pequeña prolongación muy chiquitita, un pequeño gancho que distingue a una letra hebrea de otra.
Por ejemplo la "b" "Beth" tiene un ganchillo en la esquina inferior derecha para distinguirla de la "Kaf".
Por lo tanto, y lo que quiere decirnos el Señor, es que ni el más mínimo sentido del AT testamento dejará de cumplirse. Ni una rallita de la t, ni un punto de la i.
5.- En el v. 19 Jesús habla de que no se puede despreciar ningún mandamiento por pequeño que sea ¿Por qué tuvo que decir esto? Lee Mt. 15:6-9.
En la época de Jesús los fariseos habían dejado de lado los principios de la ley y habían instituido un sistema legal, detallado y complicado, de cómo cumplir con cada una de ellas. Y ante todo esto Jesús les dice:
Mt 15:6-9 "… habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición. Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran,
Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres".
Vemos pues que esta es una acusación constante de Jesús a los escribas y fariseos de Jerusalén. Y es que ellos, en su tradición oral, la que luego se conformaría en el Talmud escrito, tenían interminables discusiones rabínicas sobre ley, tradición, costumbres, leyendas e historias. Todo esto (y debido a su dureza de corazón) llegaba a asfixiar lo que Dios en la ley y los profetas del AT había dicho, pervirtiendo su significado original.
Todo ello para justificarse y no cumplir los mandamientos ni arrepentirse por ello, hoy pasa lo mismo… "bueno… eso era para los judíos, eso no es para nosotros, hoy es diferente, ha pasado mucho tiempo, no hay que ser tan radical, son otros tiempos.
¿QUÉ ES JUSTICIA?
V. 20
6.- ¿De qué Justicia nos está hablando Jesús, que si no fuese mayor que la de los escribas y fariseos no entraremos en el reino de los cielos? Lee Rm. 3:17-28.
Los escribas y fariseos se escribían la ley en las mangas y en la frente (usando las filacterias: Una de las correas se ata sobre el brazo dando siete vueltas al mismo y la otra se coloca sobre la cabeza).
Ellos se jactaban de guardar todos los estatutos y todos los mandamientos y nos dice el Señor que si no lo hacemos mejor que ellos no entraremos en el reino de los cielos.
Así que uno se pregunta: ¿de qué justicia nos está hablando Jesús? ya que si mi justicia no fuese mayor que la de estos súper religiosos ¿qué va a pasar conmigo?
Rm. 3:19-28
3:19 Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley (o sea a los que confían en que con la ley se podrán justificar delante de Dios y que no han confiado en que la ley fue para: 1.- mostrarnos el carácter de Jesucristo y para… 2.-), para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios;
3:20 ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado. (O sea otra vez: Soy pecador, y gracias a la ley lo sé).
3:21 Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; ¿qué justicia es esa que se ha manifestado y de la que testifican la ley y los profetas?… pues Cristo.
O sea no es la justicia de los hombres, por eso nos dice en este Sermón del Monte: si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, lo que nos está diciendo es que necesitamos la justicia de Cristo, no la de los hombres. La de los escribas era quedar bien con la gente, hacían obras para que los hombres los vieran, las hacían para que cuando se vieran a sí mismos se consideraran buenos. Esta es la justicia de los hombres. Por eso nos dice que si no fuese mayor que esa ¡no tenemos nada que hacer!!
Por eso Rm 3 nos lo explica muy bien y no habla de la justicia de los hombres, dice la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; y es que no hablaron de otra cosa Moisés y los profetas que de una Justicia. ¿cuál?…
3:22 la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo (El punto central de toda la ley de Moisés y de los profetas era la Justicia de Dios, era Cristo), para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia; (esa justicia sólo será válida para los que creen en Él, no es para todos los hombres si más).
3:23 por cuanto todos (tú y yo y todos los que conozcas) pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,
3:24 siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención (el rescate) que es en Cristo Jesús (pagado por Cristo Jesús),
3:25 a quien Dios puso como propiciación (pago) por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados,
3:26 con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es (¿de la ley? no, al que es) de la fe de Jesús.
3:27 ¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras? (¿porque algunos se portan mejor que otros?) No, sino por la ley de la fe.
3:28 Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.
Volvemos a Mt. 5:20.
5:20 Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Esta es la Justicia de la que habla el Señor, la Justicia que es más alta que la de los escribas y fariseos. La Justicia que hace que al verla (que al ver a Cristo) reconozcas que eres pobre de solemnidad en ti mismo, la Justicia que te hace exclamar y llorar y lamentar tu situación. La Justicia que te hace ver que eres (no sólo pobre) sino terriblemente pobre, pobre de solemnidad, que eres un mendigo público.
domingo, 3 de julio de 2011
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